El síndrome del intestino irritable (SII) se refiere a un trastorno que consiste en dolor abdominal y cólicos, al igual que cambios en las deposiciones.
No es lo mismo que enfermedad intestinal inflamatoria (EII), que abarca la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerativa.
Causas
Existen muchas causas posibles del síndrome de intestino irritable. Por ejemplo, puede haber un problema con músculos en el intestino o el intestino puede ser más sensible al estiramiento y movimiento. Sin embargo, no existe ningún problema en la estructura del intestino.
No está claro por qué los pacientes desarrollan este síndrome, pero, en algunos casos, ocurre después de una infección intestinal. Esto se denomina síndrome del intestino irritable posinfeccioso. Igualmente, puede haber otros desencadenantes.
El estrés puede empeorar este síndrome. El colon está conectado al cerebro a través de los nervios del sistema nervioso autónomo. Estos nervios se vuelven más activos durante momentos de estrés y puede llevar a que los intestinos se compriman o se contraigan más. Las personas con este síndrome pueden tener un colon que es demasiado sensible a estos nervios.
Este síndrome puede ocurrir a cualquier edad, pero a menudo comienza en la adolescencia o a principios de la vida adulta y es más común en las mujeres. Aproximadamente 1 de cada 6 personas en los Estados tiene síntomas de este síndrome. Esta afección es la queja intestinal más frecuente por la cual los pacientes son remitidos al gastroenterólogo.
Síntomas
Los síntomas van de leves a graves, sin embargo, la mayoría de las personas tiene síntomas leves. Los síntomas varían de una persona a otra.
El dolor abdominal, la llenura, los gases y la distensión que han estado presentes durante al menos 6 meses son los síntomas principales del síndrome del intestino irritable. El dolor y otros síntomas con frecuencia:
- Ocurrirán después de las comidas
- Serán intermitentes
- Se reducirán o desaparecerán después de una deposición
- Las personas con diarrea tendrán heces sueltas y acuosas frecuentes. Con frecuencia, experimentarán una necesidad urgente de tener una deposición, lo cual es difícil de controlar.
- Aquellas personas con estreñimiento tendrán dificultad para defecar, al igual que deposiciones menos frecuentes. Estas personas con frecuencia necesitarán hacer fuerza y sentirán cólicos con una deposición. A menudo, no eliminan nada o sólo una pequeña cantidad de materia fecal.
Las personas con este síndrome también pueden presentar inapetencia.
Exámenes
La mayoría de las veces, el médico puede diagnosticar el síndrome del intestino irritable con base en sus síntomas, con pocos o ningún examen. Consumir una dieta libre de lactosa durante dos semanas puede ayudarle al médico a evaluar una posible deficiencia de lactasa.
No existe ningún examen para diagnosticar este síndrome, pero se pueden hacer exámenes para descartar otros problemas:
- Los exámenes de sangre para ver si usted tiene un conteo sanguíneo bajo (anemia)
- Coprocultivos para descartar una infección
- Los síntomas empezaron posteriormente en la vida (después de la edad de 50 años)
- Tiene síntomas como pérdida de peso o heces con sangre
- Tiene exámenes de sangre anormales (como un conteo sanguíneo bajo)
- Celiaquía
- Cáncer de colon (aunque el cáncer rara vez causa síntomas típicos de SII, a menos que se presenten síntomas como pérdida de peso, sangre en las heces o exámenes de sangre anormales)
- Enfermedad de Crohn o colitis ulcerativa
El objetivo del tratamiento es aliviar los síntomas.
Los cambios en el estilo de vida pueden ser útiles en algunos casos de síndrome del intestino irritable. Por ejemplo, el ejercicio regular y el mejoramiento en los hábitos de sueño puede reducir la ansiedad y ayudar a aliviar los síntomas intestinales.
Los cambios en la alimentación pueden ayudar; sin embargo, en general no se puede recomendar una dieta específica para el síndrome del intestino irritable, debido a que la afección difiere de una persona a otra. Los siguientes cambios pueden ayudar:
- Evitar alimentos y bebidas que estimulen los intestinos, como la cafeína, el té o las colas
- Evitar las comidas abundantes
- Evitar el trigo, la cebada, el centeno, el chocolate, los productos lácteos y el alcohol
- Incrementar la fibra en la alimentación
- Los suplementos de fibra pueden empeorar los síntomas
- Los laxantes tomados para el estreñimiento pueden crear adicción
- Medicamentos anticolinérgicos (diciclomina, propantelina, belladona e hiosciamina) tomados aproximadamente una media hora antes de comer para controlar los espasmos de los músculos del colon
- Loperamida para tratar la diarrea
- Dosis bajas de antidepresivos tricíclicos para ayudar a aliviar el dolor intestinal
- Lubiprostone para los síntomas de estreñimiento
- Medicamentos que relajan los músculos en los intestinos